Un lingote de oro es para siempre. Transfórmalo en el regalo de boda perfecto para quienes ya son padres o están embarazadas: el oro es símbolo de resistencia, estabilidad y eternidad, un buen augurio para el futuro de los cónyuges. Un corazón con un niño es símbolo de amor, ternura y protección. Regalar un lingote de oro con este grabado es un deseo de una vida llena de amor, alegría y protección para los cónyuges y sus hijos, además el lingote de oro lo pueden adquirir todos los invitados para un regalo aún más valioso.